La obra monumental recibe nueva vida tras dos meses de trabajos y se prepara para la construcción de la simbólica omega
Torreón, Coahuila. – Después de dos meses de intensos trabajos, finalizó con éxito la restauración del majestuoso Cristo Rey del Cerro de las Noas y ahora lo que falta es la construcción de la omega, una estructura simbólica que estará situada a los pies del monumental Cristo y cuya forma evoca la tradicional Noa.
La culminación de los trabajos de restauración del Cristo Rey del Cerro de las Noas fue marcada por una ceremonia de cierre especialmente significativa, durante la cual el obispo de la Diócesis de Torreón, Luis Martín Barraza Beltrán, impartió una bendición solemne al monumento, rodeado de fieles y autoridades locales.
Esta ceremonia no solo simbolizó la recuperación física de la escultura, sino que también representó un momento de profunda emoción y gratitud para todos aquellos que estuvieron involucrados y siguieron de cerca el proceso de restauración.
El acto de bendición reafirmó la relevancia del Cristo Rey como símbolo de identidad, fe y unidad para la Comarca Lagunera, consolidando el esfuerzo conjunto que permitió devolverle su esplendor y garantizar su permanencia como punto de referencia tanto para los habitantes locales como para los visitantes.
El rector del Santuario, Víctor Gómez Hernández, detalló que la imponente figura del Cristo Rey, que recibe a todos con los brazos abiertos, fue sometida a un reforzamiento estructural utilizando varilla y concreto de alta resistencia.
Gracias a estas mejoras, la escultura está preparada para resistir no solo el paso de los años, sino también los desafíos climáticos propios de la región y posibles fenómenos naturales.
Asimismo, entre las acciones pendientes se encuentra la electrificación total en la base del cerro, así como la colocación de una luz roja en la parte superior de la estructura. Estas intervenciones son esenciales para cumplir con los estándares de seguridad aeronáutica, brindando mayor protección tanto a los vuelos como a los visitantes que acuden por motivos religiosos.
