El movimiento “Poder Prieto”, liderado por el reconocido actor Tenoch Huerta y otros talentos como Maya Zapata, Vania Sisaí Rodsan y Horacio García Rojas, surge con la ambiciosa meta de combatir el racismo y la discriminación en la industria del cine en México. Fundado hace tres años, este colectivo tenía como propósito principal visibilizar las dificultades y barreras que enfrentan los actores y actrices de piel morena en la búsqueda de oportunidades laborales y una representación justa en pantalla.

A través de sus experiencias personales, los fundadores de Poder Prieto buscaban cambiar las narrativas existentes en la industria del entretenimiento, inspirando a una mayor inclusión y diversidad en las producciones cinematográficas mexicanas. Sin embargo, el camino hacia este objetivo se vio obstaculizado por diversas controversias y desafíos.

Una de las polémicas más significativas se desató el año pasado, cuando Tenoch Huerta fue acusado públicamente de abuso sexual por la saxofonista María Elena Ríos. Este incidente generó una pérdida de visibilidad y apoyo para el movimiento, debilitando su capacidad para llevar adelante su misión.

Tras casi un año de incertidumbre, el colectivo anunció su disolución. En un comunicado, lamentaron no haber logrado cumplir con su misión original y expresaron la necesidad de unirse a otras luchas desde una perspectiva individual. Aunque Poder Prieto llega a su fin, su legado perdura en el compromiso de corregir las estructuras desiguales que afectan la industria cinematográfica mexicana y mejorar la calidad de los contenidos producidos en el país.

A pesar de los desafíos enfrentados, el mensaje final del colectivo destaca que la lucha por la igualdad y la justicia social en México continúa, recordando que cada voz cuenta en el camino hacia un futuro más inclusivo y equitativo en la industria del cine.

Por adilene

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *