La ola de calor que azota los estados de Tamaulipas y San Luis Potosí ha traído consigo trágicas consecuencias para la fauna local, especialmente para las aves. Diversos informes han señalado que las extremas temperaturas han provocado la muerte de numerosas aves en estas regiones, incluyendo loros, tecolotes, pájaros carpinteros, tucanes y búhos, así como pelícanos y murciélagos.
Según las autoridades locales, se han registrado sensaciones térmicas de hasta 54 grados a la sombra, condiciones que las aves no pueden soportar y que las llevan a caer al suelo, muriendo en su mayoría de manera instantánea. Esta situación también ha afectado a otros animales, como los caballos, que están sufriendo los efectos del consumo excesivo de alimentos calientes y la escasez de agua.
Ante este panorama, colectivos defensores de animales y expertos han hecho un llamado a la población para que tome medidas de prevención y ayuda. Se insta a adecuar bebederos para que las aves puedan hidratarse, así como a seguir ciertas recomendaciones para salvar a los animales en riesgo, como llevarlos a la sombra, ponerlos en cajas con ventilación y rociarlos con agua a temperatura ambiente.
Sin embargo, la situación no se limita solo a la fauna. El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha confirmado el fallecimiento de cuatro personas adultas debido a golpes de calor en la región de la Huasteca Potosina. Además, se ha reportado un aumento en las atenciones médicas por deshidratación e insolación.
Ante este panorama, las autoridades recomiendan evitar actividades al aire libre durante el día y mantenerse hidratado. En las escuelas de la zona, se han recorrido los horarios de salida y entrada para proteger a los estudiantes del calor, e incluso se analiza la posibilidad de cambiar a clases a distancia.
La situación de calor extremo y sus impactos en la fauna y la población humana son motivo de preocupación, y se espera que se tomen medidas adicionales para proteger a todos los seres vivos afectados por esta ola de calor.